Toda empresa o marca busca permanecer en la mente de sus clientes. Esto se logra por una combinación de varias cosas. Ofrecer un producto o servicio de calidad y contar con buena atención son parte de esto. Sin embargo, el uso de logos originales supone muchas veces el punto clave del asunto.
¿Por qué los logos originales tienen esa capacidad? La respuesta es sencilla: al ir por la calle cualquiera podrá verlo y recordar lo que ofreces. La imagen que des a tu marca se quedará con los consumidores, facilitando que te ubiquen entre distintas opciones.
¿Cómo asegurarte de tener logos originales?
Hoy en día existen cientos de marcas. Cada día aparecen más, ya sean asociadas a productos o servicios. Esto hace que la idea de desarrollar logos originales pueda parecer complicada. Puede ocurrir, sin ninguna intención, que creemos un logo similar a uno ya existente.
Sin embargo, siguiendo algunos pasos es posible no caer en este problema. Solo necesitamos un poco de dedicación y paciencia, para lograr obtener la imagen ideal para el negocio y que no se confunda con otros que nos precedan.
1. Investiga
Los primeros pasos en la creación de la imagen de una empresa, sobre todo al buscar tener logos originales, pasan por la investigación. Es a través de esta que puedes saber, primero, si alguna tiene un nombre similar a la tuya.
Luego, ya en el proceso creativo, una investigación profunda tiene un doble impacto. En primera instancia, tendrás una idea de la tendencia en los logos de empresas del mismo rubro que la tuya. Luego, en segundo lugar, te permitirá crear un archivo de ideas que ya fueron utilizadas y que no quieres repetir. Después de todo, ¿quién quiere ser recordado como el que se copió de otra marca?
La investigación puede venir de todas partes. Puedes mirar logos en internet, revistas, videos, bases de datos como el de INDECOPI, televisión e incluso en los pasillos del supermercado. De hecho, es recomendable que incluso investigues en rubros distintos al tuyo pues esto puede ayudarte a concebir conceptos propios.
2. Evita utilizar plantillas
En años recientes aparecieron distintas herramientas que facilitan la creación de nuevos diseños. Muchas de estas incluyen plantillas para la creación de todo tipo de gráficos, incluso logotipos. No obstante, estas son un retroceso cuando se trata de tener logos originales.
Aunque la posibilidad de crear un logo en minutos, usando estas plantillas, suena como una situación donde todos ganamos, es perjudicial en el tiempo. ¿Por qué? Piensa que, como tú, son muchas las personas que se decantan por esta opción. Esto facilita que, en el mediano plazo, aparezcan cada vez más logos con demasiadas similitudes entre sí.
Esta es la principal razón para evitar el uso de plantillas. El diseño de logos originales requiere de atención a los detalles que harán resaltar a tu marca y eso es lo que buscas, ¿no? Esto nos lleva a nuestro siguiente y último punto.
3. Trabaja con profesionales
En ocasiones se toma el uso de plantillas como una forma de ahorrar presupuesto. Es una manera fácil de tener un logo y no contratar servicios de terceros. La verdad es que no contar con un profesional del diseño para trabajar en tus logos originales es lo que más impactará en el resultado final de tu marca.
Un especialista en identidad visual, como lo indica su nombre, se dedica a hacer de cada marca algo único. Esto lo hace aplicando sus conocimientos en diversos campos, que van desde el uso de un software hasta el efecto de un color sobre quienes lo perciben.
Trabajar con un profesional del área es una inversión. Una que te aportará resultados positivos en el posicionamiento de tu marca. Este podrá hacer realidad tu visión, lo que quieres transmitir, y te permitirá contar con logos originales que se quedarán en la mente de tus clientes en el tiempo.
Si quieres encontrar el apoyo que necesitas en el desarrollo de tu empresa, desde su identidad visual hasta su protección, consulta nuestros planes. Con gusto atenderemos tus dudas y resolveremos tus necesidades.
